Ya tenía ganas yo a esa zona que apenas conozco de La Cabrera-Miraflores-Bustarviejo y nada nos plantamos en esta Maraton destroyer esta mañana.
Se presentaba feo el día, nos llovio bastante antes de empezar, menos mal que esa lluvia no nos acompaño toda la ruta.
Los paisajes otoñales fueron increibles, el bosque encantado, impresionante, lástima no llevar la camara encima, otra vez será. Las bajaditas, lo mejor, parece mentira en mi caso, pero disfrute como un 'niño chico' bajando con la 'rigida endurera', la bajada de medio celemin chulisima, las subidas no tanto.
Un 10 a la organización, se lo han currado, los avituallamientos con melón, plátano, naranja, higos, agua y al final pasta, empanada y la tan ansiada cervecita, aunque esta vez fuera con limón.
La ruta, pues tuvo pasajes alucinantes, para los que no habéis podido disfrutar de una dia así en la Sierra Madrileña, lo lamento, otra vez será.
Aqui la máquina rigida endurera
Todo el tinglado montado dentro del pabellón de La Cabrera
Vistas de la Sierra en el pueblo desde la zona de salida-llegada, aunque esta mañana no se veía absolutamente nada por el día encapotado
Esta foto me la sacaron luchando contra las piedras, sobran las palabras
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