domingo, 30 de octubre de 2011

La inmensidad


















Agotado y punto, en la inmensidad.

Así me siento ahora, incapaz casi de que las palabras fluyan por mi cerebro, ayer fue un día muy intenso, como el Ristretto de Nescafé.

La superación no esta llevando a límites insospechados, Dónde está el límite? menudo makina el Josef Ajram ese, pero como dice Pedro, cada vez nos superamos mas.

Esta vez nos decidimos por una ruta que nos sorprendería por su belleza, el Hayedo de Montejo, los pinares, sus subidas interminables y frescor en sombra, la ruta la sacamos de el blog de Pablo jeje!, gracias por presentarnos tu rutilla también, claro esta, nosotros tardamos un pelin mas en hacerla.

Quedamos a una hora prudente, allí estábamos Mer, Baltasar y las sabanas que se le pegaron a Pedro, vamos que al final, estábamos pedaleando pasadas las 11 de la mañana en Montejo de la Sierra, antes, Gandullas nos pareció un pueblo precioso enclavado en esta parte conocida como Sierra Norte.

En los primeros kms nos sorprendieron las vacas, el terreno embarrado y unos tonos ya ocres en el paisaje, se nota por fin un cambio, esta semana hizo mas frío y por fin llego la tan ansiada lluvia.

Hasta el puerto del Cardoso, fuimos por algún rampote, piedra resbaladiza, solo otra vez había subido por allí, fue en 2009 con Edu, también remontamos hasta el Collado de Mosquito, aquella vez bajamos por Horcajuelo, en esta ocasión el temita pintaba mucho mas duro.

Mer y Baltasar abriendo el camino, yo a rueda de Pedro, mis sensaciones no eran muy buenas, él estaba trastocado por el aceleramiento en su despertar. Casi dos horas después del comienzo, alcanzamos el paso del Mosquito,antes a nuestra derecha, habíamos divisado tímidamente el Hayedo de Montejo, primer picotazo, de este, salí vivo.

Comenzo una bajada divertida, rápida, con algún repecho, esta zona del Valle Norte del Lozoya es preciosa y dura como ella sola, mas amplio y menos encajonado que Jarosa o la Hoya de San Blas, pero sorprendente. Pedro para un momento y casi nos comen unos caballos enormes y con cara de buenos.

















Al poco ya enfilamos la segunda subida del día, mas corta y mas dura, al principio pista, la misma que mina mi mente, ancha y aburrida, solo el paisaje da emoción, unos cazadores me dan vidilla, paramos, iba fatal, había comido algo, pero estaba fatigado, nos dicen que sino hemos visto el cartel, no lo vimos, se piensan que el monte es suyo, vamos por camino totalmente libre, opino que como en todo en la vida, en la montaña hay sitio para todos, Pedro se encargo de recordarme que esta prohibidisimo disparar en zonas de camino ancho, así proseguimos nuestros ciclares camino del Pico del día.

Él mismo que nos vio patear, ese que engancho mi vastos, y que en su parte final me lo subí, con el correspondiente grito de guerra, como costo el hijo de su maravillosa madre naturaleza, vaya rampotes, un cordal de unos 3-4 kms, mi vista se perdía en el horizonte, toda la Sierra de Guadarrama con una tonalidad anaranjada.
Foto de rigor arriba, la niebla nos envolvió a 2.100m, estaba en Tres Provincias a la vez, pocas veces podré repetirlo jeje.

La bajada bastante rota, el freno de Mer que iba mal, Baltasar hizo lo que pudo, mas que alguna tienda jeje y en plena montaña, ya casi rozando las cuatro de la tarde y a 1.600m de altitud, con un sol pleno y refugiados del viento por lo arboles, procedimos a zamparnos el bocata, algunos de chorizo y otros de salchichón, palmeritas de chocolate, croissants, gominolas, coca cola, parecía que no estábamos en medio de la montaña.

Tras mas de media hora de relax corporal, retomamos con unas vistas impresionantes de Segovia, al otro lado Somosierra, yo solo pensaba que íbamos a bajar muchisimo y tendríamos que remontar todo otra vez, miedito me daba pensarlo.

En Somosierra pillamos liquido, la tercera subida del día nos esperaba, en longitud, entre las dos anteriores, hacía calor, yo ya no iba nada fino, el último, como podía, fatigado, tome un gel del decartón, creo que estos los descartaré, no me van del todo bien, como las subidas anchotas jeje.

Rozando las seis y media de la tarde, llegamos al Mosquito de nuevo, esta vez el picotazo había sido fuerte, tranquilos no era Malaria, nos abrigamos bastante, esa cara estaba ya en sombra, casi no podía hablar con Pedro de aquel u tro sendero, o con Baltasar de las nuevas 29 del mercado, tan poco inapropiadas para trialerar, a mi parecer jeje, los musculos de mi cara estaban congelados. Mer estaba dolorida, el rutón nos estaba pasando factura a todos.

















Besame tontito!

Ya bien pasadas las siete de la tarde, estábamos en los coches, contentos por acabar de día, por poco, con la sensación de haber realizado todo un rutón en poco tiempo, y es que aunque la ruta fue mas de 70 kms, en los 55 kms primeros nos habíamos subido todo el desnivel, unos 2.100, una burrada! que se queden con nuestra cara en el Hayedo, que meanvisto!!!

La sensación de no poder mas, de necesitar descanso, mentalmente agotado, creo que la dureza de nuestras rutas cada vez se incrementa, quizás yo me este haciendo viejo, eso si, si algo de fuerza me quedaba, la fiesta de halloween a la que fui después me remato, iba de Muerte, aunque por mi cara demacrada no hubiera necesitado el tan buen maquillar de Ali, creo que el puerto mas duro lo subí por la noche jeje.

Divisamos un inmensidad pocas veces posible, tres vertientes, dicen que dos son pareja y tres multitud, pero hoy tres era el número perfecto, inmenso, inconmensurable, indecente en su belleza, inaudito en cada trazada, duro e intenso como el Ristretto, Tres Provincias, la inmensidad del todo.

















Mer&Pedro, sin ellos no somos tres ;-)!!

4 comentarios:

Pedro Manuel dijo...

por fin de nuevo el trio, ahora ya se acerca el mal tiempo y sera mas dificil hacer rutones

a refrescar un poco las mentes y a buscar nuevos retos

oscar dijo...

Algún reto ya esta propuesto jeje

pablo.bk dijo...

Que no hombre que no, Óscar, a Tres Provincias hay que rendirle pleitesía como a la Pedri, mínimo una vez al año, jejeje. Me encanta esa zona!!

oscar dijo...

Muy dura Pablo, esos pocos kms de cordal son jodidos, creo que hubo uno que se me resistira siempre, lo demás creo que es todo posible jeje, estando fuerte!