domingo, 9 de diciembre de 2012

Un Mingoliva de Recuerdos


















Y si algún día llegue mi fin, solo quiero renacer en aquello que yo vi, y si por ver observe tanta maravilla, yo me quedo en la montaña, alta y bella, fría y verde, por siempre en la cima.

En verano no puede, por fuerzas, subir un pico que se me resistía. Aquel día en la Titan no estaba pa muchos trotes y opte por lo mejor, ayer me resarcí y por fin pude coronar Mingoliva.

Teníamos comida familiar por Madridejos, al final en el último momento no me acompaño nadie, bueno si, mi justiciera, la que me pone en mi sitio, esa a la que cada piedra, elevación, surco o complicación, me pone una cara amable, siempre se porta fenomenal, siempre me sorprende para bien.

Salí a la hora prudencial de las 10 de la mañana, niebla tuvimos durante el camino en coche, el día estaba recio, mas fuerte me iba a poner yo a zampar luego.  Los primeros kms por carretera hasta las inmediaciones de la Sierra, algún día buscare alternativas por este lado, por Puerto Lapice ya me las enseñaron los de Alcázar.

Había cargado un track desconocido, que me sorprendió en su parte montañera, a los 15kms mas o menos, pillo el desvío hacia las estrivaciones de la Mingoliva, al principio es suave, alguna rampita se tensa y vuelves a bajar como medio km, para ya comenzar los 3-4 kms finales de subida, con rampas que mantienen el 10%, grandes tramos del 12% y en su parte final el 14%, no te obliga a meter todo, también llevaba pocos kms en las patas.

La subida me encanto, como a mi me gustan, terreno con piedras, disfrutando de un paisaje verde otoñal, varios cordales, rincones de ensueño y piedras con toque amarillento añejo, todo un espectáculo para mis ojos.

Arriba y tras varias fotos de rigor, me engullo un plátano, el viento sopla fino, estamos a casi 1.000m, veo un cortafuegos hacía otro lado, abajo Cuatro Casas, desde aquí arriba se divisa la Mancha entera jeje.

A lo lejos casi veo las migas que estaban preparando, de prisa, me calzo los automáticos y me lanzo cuesta abajo, deshaciendo parte de la subida, con precaución ya que voy solo, pronto ya el track me manda por un sitio diferente al que traía, sigo la falda de las montañas, pasando fincas, viendo cazadores apostados y fuentes.

Apróxidamente a la 1 de la tarde doy por concluida una ruta cortita pero muy interesante y con muchas alternativas por explorar, esta vez, la comilona de todo el día me esperaba :-)

En estas fechas uno siempre se acuerda de quién no esta ya con nosotros, nos sentimos melancólicos, recordamos pasajes de nuestras vidas y añoramos quizás verlos, la montaña me trajo sus recuerdos, heladoras noticias de las alturas, afortunadamente volvemos al calor terrenal rápido, sea con paellas y migas o con besos en cantinas.



Aquí algunos datos: